jueves, 25 de noviembre de 2010

Cuentos del tesoro

Escribimos unos cuentos breves sobre un tesoro.

Un día haciendo limpieza en el desván de casa de mis bisabuelos encontré un libro muy antiguo que habla sobre la batalla de Rande. Me llamó la atención aquel libro manuscrito y me puse a leerlo.Llevaba un rato leyéndolo cuando observé que una de las tapas era más gruesa que la otra. Lleno de curiosidad despegué él forro y me cayeron al suelo unas hojas. En una de ellas había un plano con el sitio dónde dos soldados habían enterrado su tesoro, en las otras decía como encontrar el sitio dónde lo habían enterrado los soldados y desde allí como encontrar el tesoro, (enterrado por mi antepasado ) me puse a buscarlo. Encontré un cofre en el que había un papel que ponía “viva has encontrado el tesoro de le fanmilia Rey” y el tesoro valorado en dos millones de euros. Gael Rey Fernández

Era una tranquila tarde de verano cuando estaba hablando con Corina Porro. Me hablaba sobre un mapa que estaba escondido en una losa exactamente en la 1ª de la 1ª fila. Fui corriendo y quité la losa ; encontré un papel y era el mapa. La X estaba al lado del puerto, alo mejor si buceo con mi traje a lo mejor encuentro algo.

Cogí mi traje de buceo y me sumergí .Fui buceando y… ¡ Me encontré un tiburón! Me quedé quieta pero el tiburón vino hacia mi lo que hice fue decirle cosas amables, se paró ,me acerqué a él y le acaricié .Luego le pedí que se fuera y yo ni me lo creo… ¡Se fue!

Seguí buceando y encontré un cofre. Me lo llevé a la superficie y dentro había mucho dinero así que me lo quedé y reformé mi casa! Miriam Álvarez Rodas

El gran tesoro: Era una tarde nublada.Y o intentaba dormir pero de repente un mapa cae dentro de mi habitación por la ventana.¡Ah!,por cierto, me llamo Tomás .Se leía “Tesorus diamantus precieatus”.Seguí todos los pasos que me indicaba el mapa hasta que llegué a dónde estaba la equis .Estuve cavando hasta la 01:30 de la mañana y el esfuerzo fue premiado. Ya que encontré un cofre lleno de joyas, esmeraldas y muchas monedas de oro. Y fui rico siempre. Tomás Collazo.

Tesoro Falso: El otro día me mudé de casa. Cuando iba a poner la cama en la habitación vi una nota en la que ponía que en el jardín había un tesoro. Fui al jardín y busqué. Y lo vi detrás de la casa . En el había una nota en la que ponía:"aproveché este tiempo para robarte algunas cosas". Entré corriendo en la casa y vi a un ladrón.Por lo menos llegué a tiempo y no me robó nada.¡Que suerte tuve! Diego Fortes

Yo estaba andando por la calle, cuando me encontré en el suelo un mapa del tesoro.( Me llamo Manuel). Entonces cogí el tesoro que indicaba por dónde tendría que pasar, entrar en el colegio Seis do Nadal, e ir al patio de tierra y excavar en el centro de las porterías. Excavé y allí estaba era un cofre pequeño.Manuel Justo

Un día que fun bañarme ao mar. Nadando, nadando, nadando….atopeime de súpeto nunha illa. Estaba chea de piratas. Comecei a escapar, corrín e corrín. Seguíronme.

Unha nena chamou:-Clara ¡. Fun xunto dela, tiña un escondite estupendo. Os piratas pasaron de longo.

A nena chamábase Nerea e díxome: - Ola Clara, penso que nesta illa hai un tesouro, axúdasme a atopalo. Eu díxenlle que si.

Fomos xuntas, as agachadas, para que non nos miraran os piratas. –Que medo¡

Fomos por un camiño, metémonos no monte e baixo unha pequena montaña estaba o tesouro.

Era un gran tesouro, todo de ouro que brillaba máis que un campo de trigo.

Levámolo de volta nunha barca que tiña Nerea , fomos a súa casa, gardámolo e alí sigue escondido. Clara Carrasco

Estaba en Goyan, y como me aburría cogí una pala y un cubo, me fui a la finca de al lado y comencé a excavar. Estuve 2 horas buscando tesoros que me sirvieran para algo, pero no encontré nada. Cuando estuve a punto de abandonar noté que la tierra no estaba húmeda. “ A esta profundidad debería estar mojado” pensé. Solo era un agujero pero dentro había dos papeles. El más pequeño decía.

Para quien lo encuentre

(para quien lo encuentre)

Y una firma rara. En cuanto al segundo papel, grande y doblado, parecía… No podía ser. Era, era un mapa del bosque. Cogí la bici y una mochila con provisiones y ropa de abrigo. Le dije a mi madre que volvería dentro de un par de horas. Sé que lo iba a necesitar pero me olvidé el móvil en casa. Pero no había vuelta atrás (en realidad si). Seguí las pistas y llegué aun lugar, un lugar que conocía muy bien. Era una pequeña fuente con un riachuelo en una también pequeña explanada de hierba. Había muchas flores, plantas y árboles. También había una gran vista, un poco tapada por la vegetación, al río Miño. Y a propósito de lo que dije antes, lo conozco muy bien porque, ¡es mi lugar favorito! Su tranquilidad es inmensa solo se escucha el piar de los pájaros.

- Un momento, ¿para quien lo encuentre? Eso siempre lo decía mi abuelo, Paquito Lenguado. Espera las letras coinciden : “para” con la “p” de Paquito, al igual que la “q”. “Lo” y “encuentre” con Lenguado. Vaya, si que era listo el abuelo je,je.

Y volví a casa con una gran anécdota para contar(aunque me cayó una bronca por no llevar el móvil encima). Amaia Ibarra

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